Leonardo Arriaga G. | Cronista Municipal
La nueva alcaldesa de Sucre, María Andreina Morillo, se juramentó ante la presidenta de la Cámara Municipal, Angie Caro, y sus palabras fueron de agradecimiento, especialmente a toda la estructura del Comando partidista. Según lo expresó, los números electorales superaron el 86 por ciento de los votos a favor de la revolución. «Fue un extraordinario trabajo desarrollado en la campaña y siempre acompañado por un maestro de la política, nuestro gobernador Antonio Primitivo Cedeño», quien estuvo presente en el acto y a quien calificó como «el mejor gobernador de Venezuela». Hizo igualmente especial mención a su vieja amiga, la diputada Yelitza Pimentel, quien se encontraba presente junto a la bancada de legisladores de su misma tolda política.
UN POCO DE BIOGRAFÍA
Emocionada, la alcaldesa reveló en su discurso algunas facetas de su vida familiar: «No tuve padre», recordó, «pero desde hace treinta años mi esposo Ali me ha acompañado en las buenas y en las malas. Hoy me siento orgullosa de contar con una pareja que también me ha dado todo su respaldo político, a toda mi familia que me rodea, a mi hijo y a mi suegra, que es como mi segunda madre».
SUS PLANES INMEDIATOS
La nueva autoridad municipal se refirió al funcionamiento de los servicios públicos: «Esta misma plaza Bolívar, descuidada, brillará para todos los biscucuyenses y se embellecerá todo el pueblo y sus parroquias. El pueblo pidió un cambio y lo tendrán».
Al finalizar su discurso y los agradecimientos, hizo mención especial al gremio de educadores, «por quienes he luchado toda la vida».
